Semillas Remolacha "Chioggia"
Antigua variedad de remolacha de origen italiano cuya coloración forma círculos blancos y rojos en su interior. Tubérculos de excelente sabor dulce. Se adaptan bien a todo tipo de climas.
Tanto las raíces como las hojas pueden consumirse en crudo o cocinadas.
Suelo
El cultivo prefiere suelos profundos, aireados, con elevada capacidad de retención de agua y con poca tendencia a formar crostras superficiales. El pH debe encontrarse entre 6.0 e 7.5. Cultivo con cierta resistencia a la salinidad.
Clima
El cultivo se adapta bien a climas templados, con buena luz y humedad.
Fertilización
Es un cultivo exigente por lo que se debe incorporar compost antes de su instalación.
Siembra
Siembra directa en el lugar definitivo de cultivo debiendose asegurarse que la semilla esté bien cubierta de tierra.
Riego
En suelos arenosos, la capacidad de retención de agua es menor y el riego en estos lugares debe ser más profundo y frecuente. En suelos arcillosos ocurre lo contrario. El riego por goteo es una buena opción para el cultivo.
Control de adventicias
Antes de la instalación del cultivo, se aconseja realizar una siembra falsa con la que incentivar la germinación de las semillas de plantas espontáneas para su eliminación antes del cultivo, y la solarización del suelo. Después de la siembra, se utilizan medios mecánicos o el mulching o acolchado con materiales orgánicos.
Control de plagas
Los pulgones, los alfilerillos o gusanos del alambre, las rosquillas, las moscas de la col y los nemátodos, son plagas del cultivo. Para prevenir la infestación y favorecer el control de los pulgones se recomienda la instalación de setos alrededor del cultivo con plantas que favorezcan los auxiliares. En caso necesario se aplica la lucha biológica con himenópteros parasitoides y predadores, y/o la aplicación de jabón potásico o azadiractina (aceite neem). Para el control de los alfilerillos debe evitarse el cultivo en tierras de alto riesgo donde se haya cultivado con anterioridad forraje, maíz o patatas, y trabajar la tierra con una labor ligera, gradeando o con pase del vibrocultor. Para el control de las rosquillas se debe evitar la aplicación de estiércol fresco, se usan cebos de salvado + melaza + Bacillus thuringiensis en la tierra junto al cultivo, se realizan pulverizaciones de Bacillus thuringiensis, se aplica el control biológico con nemátodos de Steinernema carpocapsae o, si fuera necesario, mediante aplicaciones con azadiractina. La mosca de la col puede ser controlada realizando una cobertura de trébol blanco o cualquier otro trebol rastrero, esparciendo serrín o cenizas entre las plantas, eliminando restos viejos del cultivo en el suelo, retirando y quemando las plantas infestadas, evitando el uso de estiércol fresco y acolchando con plástico. Los nemátodos se controlan mediante rotaciones de cultivo adecuadas, biofumigación o solarización del suelo.
Control de enfermedades
Destaca el oidio. Su control se realiza a través de marcos de plantación amplios, realizando una fertilización moderada sin exceso de nitrógeno y aplicando azufre en polvo o azufre en polvo+ lithothamne (1:1) en espolvoreo (menos fitotóxico que el azufre puro).