Suelo
El cultivo prefiere suelos sueltos, frescos y profundos con una textura de arcillo-calcárea, ricos en materia orgánica y potasio. El pH óptimo entre 5.7 y 7.0.
Clima
A pesar de ser un cultivo rústico, prefiere climas templados, con una temperatura de crecimiento mínima de 9 °C y rango idóneo de 16-18 °C. Las temperaturas superiores a 28°C conducen a una aceleración del proceso de envejecimiento de la raíz y a la pérdida de color.
Fertilización
Es un cultivo muy exigente, por lo que el abono debe incorporarse en la fertilización de fondo. Si no es suficiente, se debe agregar algún fertilizante mineral.
Siembra
Preferiblemente se realiza la siembra directa. Para grandes áreas de cultivos es necesario el uso de sembradoras de precisión debido al pequeño tamaño de la semilla.
Riego
Es un cultivo exigente en agua, pudiendo aplicarse tanto por riego por goteo como por aspersión. En caso de ser por aspersión, tener cuidado de realizarla por la mañana para permitir que las hojas se sequen y así evitar el desarrollo de enfermedades.
Control de adventicias
Para el control de la flora espontánea se pueden realizar falsas siembras antes del cultivo o deshierbado térmico en premergencia y/o mecánico con binadora de estrella, multifresa y rastra de dientes flexibles. Es un cultivo muy sensible a la competencia con las adventicias por lo que es fundamental este control en las fases iniciales.
Control de plagas
Los pulgones, alfilerillos o gusanos del alhambre, las rosquillas y los nemátodos son 4 plagas típicas de este cultivo. Para el control de los pulgones se deben realizar fertilizaciones moderadas sin exceso de nitrógeno, instalar bordes o setos al cultivo con plantas que favorezcan la fauna auxiliar, aplicar la lucha biológica con himenópteros parasitoides y predadores, y, si fuera necesario, aplicar jabón potásico o azadiractina. Los alfilerillos son controlados evitando los terrenos con mayor riesgo como son los que tienen elevada humedad en verano o en los que previamente se han cultivado plantas forrajeras o maíz o patata, y los que contienen más de 30 larvas/m2 (este recuento debe realizarse antes de la siembra o plantación). Las rosquillas son controladas evitando el uso de estiércol fresco, colocando cebos de salvado+melaza+Bacillus thuringiensis en el suelo junto al cultivo, o con pulverizaciones de Bacillus thuringiensis, o mediante control biológico con nemátodos Steinernema carpocapsae y, si fuera necesario, mediante la aplicación de azadiractina. Los nematodos se controlan mediante rotaciones culturales apropiadas, biofumigación y solarización del suelo.
Control de enfemedades
La alternaria y el oidio son dos enfermedades de este cultivo. Para el control de la alternaria se debe emplear marcos de plantación anchos y, si fuera necesario, con la aplicación de fungicidas cúpricos como el caldo bordelés en tratamiento preventivo. El oidio es controlado a través del uso de marcos de plantación anchos, fertilización moderada sin exceso de nitrógeno, y, si fuera necesario, con la aplicación de azufre en polvo o azufre en polvo + lithothamne (1:1) en espolvoreo (menos fitotóxico que el azufre puro).
Cosecha
Ocurre antes de que la raíz alcance su pleno desarrollo.
Poscosecha
Las zanahorias se pueden conservar durante aproximadamente 3 a 5 meses siempre que la Tª de conservación sea de 3 a 5°C y la humedad relativa del 98 al 100%. Esto último es esencial para evitar su deshidratación y que permanezcan crujientes.
